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DE LA PORTADA
¿Hubiera partici pado
Bolívar?
Sin dudarlo un solo segundo, estamos seguros de que Simón Bolívar
jamás se hubiera prestado para apostar el destino de la Patria en unas
elecciones organizadas y supervisadas por el imperio español. Para darle
soporte fiel a nuestras más absolutas y radicales convicciones, reprodu-
cimos aquí el decreto de guerra a muerte contra España y los españoles.
SIMÓN BOLÍVAR,
Brigadier de la Unión, General en Jefe del Ejercito del Norte, A pesar de nuestros justos resentimientos magnánimo corazón se digna, aún, abrirles A sus conciudadanos
por la ultima vez una vía a la conciliación y a la amistad; todavía se les invita a vivir Venezolanos: Un ejército de hermanos, pacíficamente entre nosotros, si detestando enviado por el soberano Congreso de la sus crímenes, y convirtiéndose de buena Nueva Granada, ha venido a libertaros, y fe, cooperan con nosotros a la destrucción ya lo tenéis en medio de vosotros, después del gobierno intruso de España, y al resta-de haber expulsado a los opresores de las blecimiento de la República de Venezuela. provincias de Mérida y Trujillo. Nosotros somos enviados a destruir a los tiranía en favor de la justa causa, por los españoles, a proteger a los americanos, y a medios más activos y eficaces, será tenido restablecer los gobiernos republicanos que por enemigo, y castigado como traidor a la formaban la Confederación de Venezuela. patria y, por consecuencia, será irremisi- Bolívar no
Los Estados que cubren nuestras armas, blemente pasado por las armas. Por el con- creía en el diálogo
están regidos nuevamente por sus antiguas trario, se concede un indulto general y ab- con España.
constituciones y magistrados, gozando soluto a los que pasen a nuestro ejército plenamente de su libertad e independencia; con sus armas o sin ellas; a los que presten porque nuestra misión sólo se dirige a rom- salvaguardia. Nuestras armas han venido a sus auxilios a los buenos ciudadanos que protegeros, y no se emplearán jamás contra se están esforzando por sacudir el yugo de agobian todavía a algunos de nuestros pue- la tiranía. Se conservarán en sus empleos y blos, sin pretender dar leyes, ni ejercer destinos a los oficiales de guerra, y magis- Esta amnistía se extiende hasta a los mis-actos de dominio, a que el derecho de la trados civiles que proclamen el Gobierno mos traidores que más recientemente guerra podría autorizarnos. de Venezuela, y se unan a nosotros; en una hayan cometido actos de felonía; y será tan palabra, los españoles que hagan señalados Tocado de vuestros infortunios, no hemos servicios al Estado, serán reputados y trata- podido ver con indiferencia las aflicciones razón, causa, o pretexto será suficiente que os hacían experimentar los bárbaros para obligarnos a quebrantar nuestra ofer- españoles, que os han aniquilado con la ta, por grandes y extraordinarios que sean Y vosotros, americanos, que el error o la rapiña, y os han destruido con la muerte; los motivos que nos deis pare excitar nues- perfidia os ha extraviado de las sendas de que han violado los derechos sagrados de la justicia, sabed que vuestros hermanos os las gentes; que han infringido las capitula- perdonan y lamentan sinceramente vues- Españoles y Canarios, contad con la muer-ciones y los tratados más solemnes; y, en tros descarríos, en la íntima persuasión de te, aun siendo indiferentes, si no obráis fin, han cometido todos los crímenes, redu- que vosotros no podéis ser culpables, y que activamente en obsequio de la libertad de ciendo la República de Venezuela a la más sólo la ceguedad e ignorancia en que os América. Americanos, contad con la vida, espantosa desolación. Así pues, la justicia han tenido hasta el presente los autores de aun cuando seáis culpables. exige la vindicta, y la necesidad nos obliga vuestros crímenes, han podido induciros a a tomarla. Que desaparezcan para siempre Cuartel General de Trujillo, 15 de junio de 1813 ellos. No temáis la espada que viene a ven- del suelo colombiano los monstruos que lo garos y a cortar los lazos ignominiosos con Simón Bolívar
infestan y han cubierto de sangre; que su que os ligan a su suerte vuestros verdugos. escarmiento sea igual a la enormidad de su Contad con una inmunidad absoluta en Es copia. perfidia, para lavar de este modo la man- vuestro honor, vida y propiedades; el solo Pedro Briceño Méndez,
cha de nuestra ignominia, y mostrar a las título de americanos será vuestra garantía y Secretario

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